La poesía me ha permitido vivir con dignidad

domingo, 9 de enero de 2011

Escribir política

¡La suerte de Reyes!

Tras el fallo de la Procuraduría que dejó a Mauricio Pinto sin posibilidades para aspirar al primer cargo del Departamento, el panorama político dio sendos virajes. Los “barretistas” que hasta entonces daban todo por la aspiración del ex secretario General de la Gobernación, advirtieron que mientras se desteñía su candidatura, el grupo que acompaña al liberal Luis Carlos Delgado Peñón ganaba terreno en cada rincón del Tolima, así que decidieron dar el giro y respaldar a Jaime Eduardo Reyes.

Pero antes de esta decisión casi obligada, muchos adeptos a la campaña que pintaba bien, detractaron y atacaron con sevicia y maledicencia la cautelosa aspiración del ex secretario de Desarrollo Agropecuario del Tolima. La terquedad o la vanidad que da el poder hicieron que estos personajes desconocieran en Reyes al candidato más preparado para suceder a Barreto quien ha hecho una Gobernación con méritos que deben decirse a cielo abierto.

Olvidaron que el ex concejal y ex diputado fue jefe de debate de Barreto en el Tolima; que conoce el sector agropecuario y su dinámica frente al desarrollo; los logros obtenidos mientras fue jefe de la cartera más importante para el Tolima y que abrió caminos de prosperidad a los campesinos entre otras buenas ejecutorias. Hasta ese momento había errado Barreto al ignorar la coalición que lo llevó al poder el 2007 para tomar la decisión de optar por un candidato, y erraron también sus amigos al asumir esa precaria conducta.

La arremetida sin fundamentos contra Reyes poco a poco causó en el Partido Conservador serios quebrantos, basados en no menos que la furia de líderes azules que vieron en la disposición de Barreto una afrenta hacia los integrantes de la coalición que lo llevó a la victoria luego del intento fallido para ser alcalde de Ibagué en 2003 cuando quedó tercero con 26427 votos.

La actitud de Reyes Martínez fue sumisa e inteligente. A pesar de seguir en su tarea de conquistar el corazón de los tolimenses con sobradas pruebas de efectividad, esperó paciente que lloviera en la fachada del “Palacio del Mango” y la pintura se fuera cayendo por haberla preparado a la carrera y con la necedad de quien agrega más agua con tal de rendirla sin importarle la calidad.

Ahora Reyes es el candidato oficial de esa coalición y las cosas para Delgado se complican. La candidatura ya limpió paredes, resanó fisuras, preparó la pintura y con manos solidarias y gratas se empieza a pintar el triunfo de Jaime Eduardo Reyes. Uno se pregunta si es cuestión de suerte, y a mi manera de verlo digo y firmo sobre esta idea: en la vida cuando hay preparación y oportunidad llega la suerte como un chispazo… Reyes sembró y es hora de recoger la cosecha.